La llamada de Cthulhu
Descripción del audiolibro
La llamada de Cthulhu es un cuento del escritor estadounidense H.P. Lovecraft. Escrita en el verano de 1926, se publicó por primera vez en la revista Weird Tales, en febrero de 1928.
Resumen del audiolibro
La historia trata de un manuscrito encontrado entre los papeles del difunto Francis Wayland Thurston, de Boston. En el texto, Thurston relata su descubrimiento de las notas dejadas por su tío abuelo, George Gammel Angell, profesor prominente de lenguas semíticas en la Universidad de Brown en Providence, Rhode Island, quien murió repentinamente en "el invierno de 1926/27" después de ser "empujado por un negro de apariencia náutica".
El primer capítulo, El Horror en Barro, se refiere a una pequeńa escultura en bajorrelieve encontrada entre los papeles, que el narrador describe: "Mi imaginación un tanto extravagante produjo imágenes simultáneas de un pulpo, un dragón, y una caricatura humana... Una apariencia pulposa, la cabeza coronada con tentáculos un cuerpo grotesco y escamosa con alas rudimentarias". La escultura es obra de Henry Anthony Wilcox, un estudiante de la Escuela de Diseńo de Rhode Island que basa su trabajo en sus sueńos de "grandes ciudades ciclópeas de bloques titánicos y monolitos arrojados del cielo, todo empapado por alguna sustancia verde y siniestra con latente terror". Wilcox con frecuencia hace referencia a los términos de Cthulhu y R'lyeh, y Angell también descubre los informes de "enfermedades mentales y brotes de locura grupales" en todo el mundo (en la ciudad de Nueva York, "levantamientos histéricos" policías mafiosos, en California, una colonia de personas con batas blancas para esperar un "glorioso cumplimiento").
El segundo capítulo, El cuento del Inspector Legrasse, analiza la primera vez que el profesor había escuchado la palabra "Cthulhu" y ha visto una imagen similar. En la reunión de 1908 de la Sociedad de Arqueología Americana en St. Louis, Missouri, un funcionario de la policía de Nueva Orleans llamado John Raymond Legrasse pidió a los anticuarios reunidos identificar una estatuilla compuesta por una piedra de color verde-negruzca no identificable, que "había sido capturado unos meses antes en los pantanos boscosos del sur de Nueva Orleans durante una redada en una reunión voodoo". El ídolo se asemeja a la escultura de Wilcox, y representaba "... un instinto con una malignidad terrible y antinatural, era de corpulencia algo hinchada, en un bloque rectangular o pedestal cubierto con caracteres indescifrables".
El 1 de noviembre de 1907, Legrasse había llevado un grupo de policías en busca de varias mujeres y nińos que desaparecieron de un asentamiento irregular. La policía encontró los cuerpos de las víctimas "extrańamente desfigurados" que se habían utilizado en un ritual que se centró alrededor de la estatuilla: casi 100 hombres - todos de un "tipo muy bajo, de sangre mezclada y mentalmente aberrantes, rebuznaban, bramaban y se retorcían" cantando en varias ocasiones la frase: "Ph'nglui mglw'nafh Cthulhu R'lyeh wgah'nagl fhtagn". Después de matar a cinco de los participantes y arrestar a otros 47 , Legrasse interrogó a los prisioneros y aprendió "la idea central de su fe repugnante": " Ellos adoraban, por lo que dijeron, a los Grandes Antiguos que vivieron en las edades antes de que hubiera hombres y formaron un culto que nunca había muerto... escondido en los distantes y oscuros lugares de todo el mundo hasta el momento en que el gran sacerdote Cthulhu, desde su casa oscura en la poderosa ciudad de R'lyeh bajo las aguas, se elevara y trajera de nuevo la tierra bajo su dominio. Algún día él iba a llamar, cuando las estrellas estuvieran listas y el culto secreto siempre estará esperando para liberarlo".
Los prisioneros identificaron a la estatuilla como "el gran Cthulhu" y tradujeron la frase cantada como "En su casa en R'lyeh el Cthulhu muerto espera sońando." Un cultista particularmente locuaz, conocido como "viejo Castro", nombró el centro del culto como Irem, la Ciudad de los Pilares, en Arabia, y se hace referencia de un pasaje relevante en el texto del Necronomicon: "Lo que no está muerto que puede yacer eternamente y con extrańos eones incluso la muerte puede morir".
Uno de los académicos presentes en la reunión, William Channing Webb, profesor de antropología de la Universidad de Princeton, afirma que en una expedición de 1860 "en lo alto de la costa oeste de Groenlandia" había encontrado "una tribu singular de culto degenerado de esquimales cuya religión, era una curiosa forma de culto al diablo, con sed de sangre deliberada y repulsiva, lo había dejado helado". Webb afirmó que el culto de Groenlandia tenía el mismo canto y un fetiche horrible similar."
El tercer capítulo, La locura del mar, se refiere a la investigación propia de Thurston en el culto. Thurston descubre un artículo del 18 de abril de 1925, del Boletín de Sydney, un periódico australiano. El artículo informó el descubrimiento de una nave abandonada en el Océano Pacífico, con sólo un sobreviviente - marinero noruego Gustaf Johansen, segundo de a bordo de la goleta Emma, que zarpó de Auckland, Nueva Zelanda. El 22 de marzo, el Emma aparentemente encontró un yate fuertemente armado, "La Alerta", tripulado por "una extrańa y de mal aspecto tripulación de Kanakas y mestizos" de Dunedin, Nueva Zelanda. A pesar de ser atacados por La Alerta sin provocación alguna, la tripulación del Emma fue capaz de matar a la tripulación de La Alerta, pero perdió su propia nave en la batalla. Apoderándose de La Alerta, la tripulación superviviente siguió navegando y al día siguiente descubrió una isla en las inmediaciones de las coordenadas de 47°9′S 126°43′O, a pesar de que no existieran islas trazadas en la zona. Con la excepción de Johansen y otro hombre, la tripulación restante murió en la isla, pero Johansen fue aparentemente "más reticente" sobre las circunstancias de la muerte de la expedición.
Thurston se da cuenta del artículo de que la tripulación de La Alerta estaba conectada al culto de Cthulhu y viaja a Nueva Zelanda y luego Australia, donde en el Museo Australiano él ve una estatua recuperada de La Alerta con una "cabeza de calamar, el cuerpo del dragón, escamosas alas y un pedestal con jeroglíficos". Al viajar a Oslo, Noruega, Thurston se entera de que Johansen murió repentinamente después de un encuentro con "dos marineros de Lascar". La viuda de Johansen ofrece a Thurston un manuscrito escrito por su difunto marido, que revela el destino final de la tripulación del Emma.
La isla desconocida fue descrita como "una línea costera mezclada con barro, muzgo y maleza que no puede ser nada más que la sustancia tangible del terror supremo de la tierra - la ciudad de cadáveres de R'lyeh." La tripulación también se esfuerza por comprender la geometría no euclidiana de la ciudad. Cuando los marineros se las arreglan para abrir un "portal tallado monstruosamente", se enfrentan a un nuevo horror: "Una inmensidad verde gelatinosa se avistó por la puerta negra... Las estrellas estaban alineadas otra vez y lo que un culto ancestral no había podido hacer, un grupo de marineros inocentes había hecho por accidente. Después de incontables ańos, el gran Cthulhu estaba suelto de nuevo y con un hambre voraz de placer."
Johansen describe a Cthulhu como "una montańa [que] camina o tropieza...", la tripulación intenta huir, sin embargo, casi todos cuales son asesinados por la criatura o mueren al caer de las alturas de la ciudad extrańa. Johansen y un compańero de tripulación regresan al barco y zarpan, pero se dan cuenta con horror que Cthulhu ha entrado en el agua para perseguir la nave. Johansen da vuelta a La Alerta y la estrella contra la cabeza de la criatura, la cual explota con "una porquería fangosa como de un molusco", sólo para que inmediatamente después se vuelva a regenerar. "La alerta se escapa, con el compańero de tripulación de Johansen enloquecido y quien muere poco después.
Después de terminar el manuscrito, Thurston da cuenta de que ahora es un blanco, pensando, "Yo sé demasiado, y el culto sigue vivo."